En el duro asfalto encuentro animales, sobre todo aves, muertos. Hasta nuestros perros respetan los cuerpos inertes.
No los dejamos tirados, improvisamos sudarios y procuramos lugar donde puedan terminar su tránsito.
Poeta Bonilla también realiza labores de enterrador de inocentes...
... Soy enterrador y vengo de enterrar mi corazón...
(Montorio. Torres. Camp)
EN LOS RECOVECOS MÁS INSOSPECHADOS DEL PARQUE
hallo animales heridos de muerte
pajarillos, gatos o ardillas... con las retinas rotas de pánico
son tiempos confusos para el hombre
y su sombra disforme, que brilla y resplandece
cuando no hay sol
me guarnezco las manos e improviso sudarios
que protegerán la intimidad de los muertos
organizo sepulturas con tierra y hojarasca
luego, marcho a mis quehaceres del día
y es cuando me invade el color de los funerales
reliquias de pan de azúcar, arcos de flores…
y mi pena viaja por tubos muy gordos hasta las rosaledas
me acompaño en el sentimiento y percibo gusanos en vivo
aguzando los dientes, retozando entre pellejos y vísceras
como quienes gozan por sus homicidios
Foto RauLuz 22.10.2020
RauLuz, Vallecas. Madrid 2020
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