28 abr 2012

Sobre histerias y vibradores

Es posible que todo se deba a la buena acogida que la película Hysteri tuvo en el Festival de cine de Toronto el pasado 15 de septiembre de 2011.
Hysteri de Tanya Wexler
Dirigida por la estadounidense Tanya Wexler narra en clave de comedia romántica la historia de la invención del vibrador. 
A partir de aquí proliferan por internet muchos artículos a propósito de la histeria femenina y la invención del mentado aparatillo, además de los artículos, ya clásicos, de wiki y otras enciclopedias online.

Dedicado especialmente a nuestro caro  JL Moreno Ruiz y a sus Contradiarios y en la imposiblidad de pegar en los comentarios de su blog este artículo con sus imágenes vaya pues que lo publicamos aquí.

El colega que previamente nos lo envió lo titulaba:

Y yo sin saberlo:
   
HISTORIA DEL VIBRADOR

En la antigua Grecia, cuando una mujer sufría de histeria, se decía que padecía de útero ardiente, luego en la Edad Media se la denominó como sofocación de la matriz y se suponía que su causante era la abstinencia sexual, ya que ésta provocaba la retención del esperma femenino, responsable del padecimiento. De hecho existió una época en la que se recomendó que la comadrona se impregnara un dedo en aceite de lirio o de nardo, que lo introdujera en la vulva de la mujer histérica y lo agitara fuertemente. Más formalmente, se aconsejaron las relaciones sexuales, por lo que muchas veces la maternidad acabó transformándose finalmente en el tratamiento salvador de las mujeres histéricas.
Masajes del Doctor Swift. California mediados de 1800
En la Inglaterra victoriana del siglo XIX, los médicos solían combatir la histeria femenina acariciando manualmente el clítoris de las pacientes hasta que pudieran alcanzar el orgasmo, que en esa época era conocido como paroxismo histérico, puesto que consideraban que el deseo sexual femenino reprimido era una enfermedad.
Una lección del Doctor Charcot en la Salpêtrièrie por Andrè Brouillet, 1887
Ya cansado y dolorido de utilizar su mano, el doctor Joseph Mortimer Granville desarrolló el primer vibrador eléctrico en la década de 1880. El objetivo era utilizarlo en su consultorio como una herramienta terapéutica contra la histeria, que en aquellos años asolaba a las mujeres como una especie de epidemia. El único problema era su tamaño industrial. La paciente se tumbaba en un diván y el doctor le aplicaba el vibrador electromecánico en la entrepierna, consiguiendo un orgasmo en unos 10 minutos, más o menos.

El doctor Joseph Mortimer Granville y la consulta diván, 1880
Lo más curioso es que en aquella época se consideraba impropio que una mujer entrara sola al consultorio de un médico, por lo que generalmente las madres y en algunos casos los maridos de las pacientes, se sentaban tranquilamente a un lado de la camilla mientras el médico masturbaba a su hija o esposa. Como naturalmente resultaba un tanto engorroso acudir al médico para ver como a la paciente le aliviaban la histeria, el potencial mercado para los vibradores de mano era enorme, y esto fue aprovechado enseguida por la empresa Hamilton Beach que los patentó en 1902. Para esa época, el vibrador personal fue el tercer aparato eléctrico disponible en los hogares, solamente precedido por la nevera y el ventilador, pero mucho más antiguo que la plancha eléctrica, la licuadora y la aspiradora. Las mujeres podían comprar sus aparatos por correo ya que se anunciaban normalmente en revistas de decoración y bordado. Por ejemplo, un anuncio de 1910 decía: 
La cura al envejecimiento ha sido descubierta en las vibraciones. Los más grandes científicos dicen que le debemos no sólo nuestra salud sino también la misma vitalidad a esa fuerza maravillosa. La vibración promueve la vida y el vigor, la fuerza y la belleza. Si su cuerpo vibra, usted se sentirá bien y no enfermara jamás.
Anuncio de venta de vibradores, 1910
Su comercialización llegó a tal extremo que algunos modelos incluían un recambio adaptable que convertía al vibrador en una batidora.
Para la década de 1920, en los hogares norteamericanos había más vibradores que tostadoras; y aunque desaparecieron de las consultas de los médicos, seguían considerándose aparatos clínicos para proporcionar relax a las histéricas más inquietas.

La buena imagen y reputación de los vibradores cambió completamente a mediados del siglo XX por dos razones. Primero porque en 1952, la Asociación Americana de Psiquiatría declaró oficialmente que la histeria femenina no era una enfermedad legítima, sino un mito anticuado, y el segundo motivo fue que la popularidad del cine hizo que las películas pornográficas tuvieran más difusión, y varias de ellas mostraban actrices utilizando el vibrador como juguete sexual y la gente los empezó a ver como objetos de perversión. Esto originó que los vibradores desaparecieran de las revistas femeninas, catálogos y estantes de tiendas populares como Sears, donde se habían vendido durante casi medio siglo.
Catálogo Sears de 1918 que muestra varios anuncios de vibradores.
Fotograma de una película y la utilización de un vibrador
 A mediados de la década de 1970, en plena explosión del feminismo, la sexóloga americana Betty Dodson empezó a utilizar vibradores en sus talleres de salud sexual femenina y poco después los aparatos fueron reapareciendo en los estantes de farmacias especializadas, y no únicamente en los sex shops. También recibieron otro gran impulso en 1986, cuando el Dr. Everett Koop lo incluyó en una lista de prácticas de sexo seguro dentro de un folleto de prevención del SIDA que se envió a los 107 millones de hogares estadounidenses, siendo este el mayor correo enviado en la historia de ese país.

Estos aparatitos han ido evolucionando a la par de la tecnología y hoy es posible encontrarlos hasta como un accesorio para el IPod, el cual vibra al compás de los sugerentes ritmos musicales.

Buddy Guy interpreta Fever. Festival de Jazz de Montreux 2009

Little Willie John interpreta Fever de Eddie Cooley y John Davenport.  
1956
En mi casa mando yo, pero mi mujer toma las decisiones -Woody Allen-
RauLuz Vallecas. Madrid 2012

7 comentarios:

Caminando sobre la Luna dijo...

Nota aclaratoria: Cuando íbamos a editar el texto y las imágenes nos dimos cuenta de la cantidad de imprecisiones que nos encontrábamos en la relación del texto con las imágenes utilizadas, incluso el corte perverso del cartel del Doctor Swift para acoplarlo en las menciones al doctor Granville, ni una imagen de este en los artículos, no dar título ni origen al cuadro de André Brouillet y alguna lindeza más. Así que nos pusimos manos a la obra y este es el resultado que seguro que incluye alguna otra imprecisión que se nos habrá escurrido entre las mientes. Total que decidimos editarlo de nuevo a nuestra manera y así queda. En los enlaces podéis seguir investigando, incluso como ver completa online la película Hysteri con muy buena calidad por cierto, pero hay que buscarlo que no os lo vamos a dar todo hecho.

Anónimo dijo...

Awesome!

José Luis Moreno-Ruiz dijo...

Precioso. ¡Hay que ver lo mucho que dio de sí una taxonomía como la de "Histeria"!
Por cierto, si me permitís una anécdota, que ya va siendo uno mayor y en consecuencia gusta de las batallitas, en 1971 asistí en la Universidad de Río Piedras, en Puerto Rico, pipiolo estudiante yo entonces, a una conferencia de la muy ilustre Betty Dodson, a la que se cita en el texto de arriba (lo cual es decir ut supra, que queda la mar de fino). Pues bien, al final hubo coloquio, muchas chavalas lanzadísimas por allí, entre otras la que entonces era mi novia, una linda gringuita llamada Colleen, pero he aquí que intentó ligarme la mentada Betty Dodson, a la sazón cuarentona un poco gallinota... Colleen me sacó de allí, bastante cabreada.
En fin, cosas; batallitas propias de la edad, ya decía.
Besos y abrazos, queridos. Muy queridos.
JL

Caminando sobre la Luna dijo...

Querido JL, un inmenso placer a la par que divertido recolocar las piezas con un poquillo de sentido y gracias por compartir tus historias con nosotros, lujo del bueno… A saber qué le dijiste a Betty Dodson. Nos imaginamos a Collin sacándote de la sala con presteza, y donosura, retando a la Dodson, tipo se mira pero no se toca.
Un abrazo gigante. Cuídate

Caminando sobre la Luna dijo...

Anónimo. Gracias por tu visita. Hasta cuando quieras. Un afectuoso saludo

Jesús dijo...

Rastaman vibration yeah! Positive
Live if you want to live
Got to have a good vibe! :)
http://www.youtube.com/watch?v=v17HsJNEnS4

Besos.

Caminando sobre la Luna dijo...

Que así sea. Besos